martes, 27 de diciembre de 2011

Finanzas y financieros...

Esto engorda al cebón de San Antonio,
y a otros muchos más cerdos todavía,
que pagan con monedas no acuñadas.

Noticia esperada: se acerca "la misa de las familias" (ya cada vez con menos propaganda y fervor por los números inflados, aunque se nos haya invitado a todos los fieles del universo mundo)

Noticia inesperada: se necesita financiación y se ingenia el sistema de financiarla por móvil.

Al final lo de siempre, poderoso caballero es don dinero... ¿A qué meterse en tales celebraciones si al final se han de cargar sobre la gente que cada año es más pobre y necesitada?  ¿No hay medios de hacer la cosa más barata y sin que cargue gasto alguno sobre el fiel más allá del acostumbrado estipendio? Cuidado con hacer parecer estas cosas un negocio porque al final se acaba generando luteros y tocarán los violines de como la ambición de ser en lugar del enseñar y exigir el ser terminó por mostrar lo rutinario y mundano de tales actos.

Por otro lado, lo que sí se muestra ya es que, caído el poder socialista , los que se hubieran prestado gustosos a financiar tales actos de manifestación pública tan susceptibles de ser lugar de propaganda de la oposición han pasado a considerarlos como dispensables y seguramente no aportan lo que daban otrros años. De ahí que el ingenio de los organizadores se las tenga que componer para sacar nuevas formas de financiación. En fin, que no aprenden nada ni aprendemos nada de esta curiosa conjunción de política y religión en la España de hoy donde apenas nadie es católico y el que lo es lo es según su cuerda y no tanto según el corazón de la Iglesia, que está con las familias y con las familias más pobres y los pobres que no tienen ni familia a la que acudir en estas fiestas. 

Sólo una pregunta al corazón del católico avispado:

¿Hay algo más esperpéntico que hablar de financiación de una Misa y que para nada signifique eso las tradicionales fundaciones por determinados sufragios?

M.D.

1 comentario:

Josefina dijo...

No hay caso. Me sigue pareciendo actual y perfecta esa famosa frasse de Chesterton sobre la Iglesia que mueva al mundo y no movida por el mundo... No sé si es que yo me cierro absolutamente como me dicen algunos y entonces no consigo comprender, pero la verdad es que no me pareció nunca ni me parece ahora que la Iglesia haya durado 2010 años por haberse mundanizado, sino todo lo contrario. Cuanto más se mundaniza más recibe la asistencia del Espíritu Santo y se cumple la promesa de su Divino Fundador, y por eso sobrevive. Es así y no hay otra. Pero casi nadie lo cree. Se cree en el hombre y en el progreso, y entonces se cree que el hombre y el progreso van a hacer que la iglesia subsista. Parece mentira, ¿eh?